La capacidad de ser madre es, sin duda, uno de los regalos más grandes y maravillosos que la naturaleza nos ha dado. El increíble proceso del embarazo es casi un milagro; nueve meses en los que el pequeño bebé va creciendo y desarrollándose hasta estar listo para salir y acompañarnos en el increíble viaje de la vida.

Si bien podemos ver como el cuerpo de una embarazada va creciendo y cambiando conforme pasan las semanas y es posible ver, gracias a la tecnología, cómo se va desarrollando el pequeño en el vientre materno, existen algunas cosas que seguro no sabías que los bebés pueden hacer estando dentro del vientre materno.

Le da hipo

A partir de la semana 18 de gestación se puede sentir un pequeño cosquilleo que poco a poco se va definiendo a claros movimientos. Y hasta la semana 27 es cuando el bebé puede presentar episodios de hipo; esto es perfectamente normal y le sirve como entrenamiento para aprender a respirar una vez se encuentre fuera del útero.

Da patadas y movimientos bruscos
En la semana quince comienza el bebé a voltearse, acurrucarse y mover las piernas y brazos, pero su tamaño es tan pequeño que pueden realizar sus movimientos sin que la madre lo note. Conforme el bebé va creciendo el espacio dentro del vientre se reduce y por tanto él hace movimientos bruscos tratando de acomodarse.


Mueve los ojos
Puede moverlos desde la semana 16 pero no los abre porque no están totalmente formados sino hasta la semana 26, es entonces cuando puede abrir sus párpados por primera vez y está listo para ver el mundo que le rodea. Inclusive puede reaccionar a una luz intensa que se acerca mucho al vientre, en este caso el bebé tratará de taparse con las manos.

Bebe líquido amniótico
Este líquido se forma en la cuarta semana del embarazo, se encarga de proteger al bebé de lesiones externas, mantenerlo calentito e inclusive de alimentarlo. Cada traguito proporciona al bebé proteínas; algunos estudios aseguran que el sentido del gusto se desarrolla en la semana 16 y pueden saborear lo que su mamá consume a través de este líquido.

Se chupa el dedo
Chuparse el dedo es un reflejo natural para aprender a succionar la leche y sucede a partir de la semana 18, cuando mide apenas 14 cm aproximadamente.

Foto: Bebesymas

Escucha y reconoce la voz de su madre
La voz de esta es el estímulo más importante que el pequeño recibe del mundo exterior. A partir de la semana 19 su cerebro está tan desarrollado que su sentido del oído se vuelve mucho más agudo. Por esta razón los expertos recomiendan hablar con el bebé, cantarle y contarle cuentos; así, una vez afuera el bebé podrá sentir la misma seguridad que sentía dentro del útero.

Sonríe y bosteza
SI bien no se sabe a ciencia cierta porqué los bebés bostezan, una investigación realizada en el Reino Unido sugiere que los bostezos son una señal de salud que indican la madurez del cerebro. A partir de la semana 28 los bebés pueden ya gesticular y, por tanto, muchos comienzan a hacer gestos similares a una sonrisa.

Foto: Bebesymas

Desecha toxinas a través de la orina
A partir de la semana 11 comienza a notarse la función renal del bebé. Luego de nutrirse de lo que la madre le proporciona el pequeño debe deshacerse de las toxina y lo hace orinando cada media hora.

Sin duda la vida dentro del vientre materno es hermosa y espectacular. ¿Sabías todos estos datos?

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Fuente:
Bebesymas