¨Enséñales a tus hijos cómo pensar, no qué pensar¨ y este pequeño corto de pixar

Desde pequeños se nos debe inculcar ser los protagonistas de nuestra vida y los escritores de ellas. Educarnos como seres autónomos capaces de tomar nuestros propios riesgos y decisiones, así mismo, asumir responsabilidades y las consecuencias de nuestros actos. Pues esto a su vez, nos llevará a educar a nuestros hijos de la misma forma y es esencial que también les hagamos ver que equivocarse está bien porque siempre, siempre de un error o equivocación, viene un aprendizaje. Además es necesario recordarnos y recordarles que, aunque se caiga, uno se debe levantar, sacudir y seguir adelante. Todo un kit de herramientas necesarias para enfrentar la vida y el mundo que nos rodea.

No hay nada que nos haga desafiarnos más que los problemas y errores pues son precisamente los que nos demandan un esfuerzo que a su vez implica adaptación o un cambio. Cuando nos vemos ante una situación difícil, todos nuestros recursos cognitivos se ponen en marcha y esto termina por hacernos reorganizar todo nuestro esquema mental. Es por ello que se recomienda que a los niños se les planteen desafíos para que analicen, reflexionen y tengan la capacidad de tomar decisiones, esto a cambio de darles verdades absolutas a la ligera.

Por lo general, imponemos a los niños a ideas, haciéndoles aceptar sin cuestionar pero esto no terminará siendo significativo para él/ella y tampoco almacenará dicha información como algo relevante, simplemente la dejará en algún sitio de su memoria pero no tendrá importancia y poco a poco la habrá de olvidar.

Es importante darles la oportunidad de pensar cómo solucionar una situación o un problema, que analicen en qué parte fue que se equivocaron para producir una reestructuración que da lugar al crecimiento del conocimiento. Cuando les damos esto, los niños adquieren mayor seguridad y confianza en su capacidad y habilidades y terminan enfrentando la vida con mayor seguridad. Permite que tus hijos se equivoquen y hagan las cosas de vez en cuando a su manera, así se formará su núcleo de valores y su capacidad de razonamiento y reflexión serán más significativos.

¿Cómo se logra?

Un grupo de psicólogos expusieron que la motivación y la eficacia servían en ocasiones pero hasta cierto punto cuando se trataba de tareas aburridas o repetitivas, sin embargo, esto terminaba siendo contraproducente cuando los problemas requerían de reflexión y análisis.

Y lo curioso, era que quienes no recibían ningún premio como motivación, eran quienes terminaban obteniendo los resultados más sobresalientes. Y entonces se llegó a la conclusión de que ese tipo de ¨motivación¨, propiciaba que recurrieran a atajos poco éticos con tal de conseguir el premio pero el problema planteado no concretaba el objetivo con estas acciones.

Edward L. Deci postuló su teoría denominada Teoría de la Autodeterminación, en la que planteó que para que niños y personas den lo mejor de sí mismos, no es necesario recurrir a la recompensa, sino brindar un entorno que implique lo siguiente:

1. Sentir que tenemos cierto grado de competencia, de manera que la tarea no genere una frustración y una ansiedad exageradas.

2. Disfrutar de cierto grado de autonomía, de manera que podamos buscar nuevas soluciones e implementarlas, sintiendo que tenemos el control.

3. Mantener una interacción con los demás, para sentirnos apoyados y conectados.

Para concluir, Pixar creó un vídeo en el que muestra la importancia de permitirles a los niños seguir y decidir su propio camino y no darles respuestas y soluciones, sino dejarlos reflexionar, equivocarse y tomar sus propias decisiones: