Pareja molesta con el pésimo servicio reaccionan con esta grandiosa idea.

Steven y Makenzie Schultz son los padres orgullosos de una pareja de hermosos niños gemelos, son también trabajadores dedicados. Cualquiera coincidiría que de vez en cuando merecen una noche para ellos solos.

Pero cuando su más reciente aniversario resultó ser de lo peor, los Schultz hicieron algo totalmente inesperado.

Criar gemelos es una labor difícil para cualquier pareja, y si le sumas un trabajo de tiempo completo tienes como resultado una vida muy ocupada, por decir lo menos. Así que cuando Steven y Makenzie decidieron tomarse un respiro y festejar, ellos solos optaron un por elegante, y de primer nivel, restaurante: el Kazoku Sushi.

Por desgracia para la pareja, no eran los únicos que habían decidido cenar aquella noche ahí, una horda de gente optó por la misma opción.

Foto: BigStockPhoto.com

Las cosas empezaron mal desde el principio. El mesero tardó 20 minutos en atenderlos en su mesa; luego de 40 minutos por fin llegó el aperitivo que ordenaron, y sus entradas tardaron 40 minutos más. Era una completa pesadilla, pero la pareja vieron rápidamente cuál era la verdadera razón del retraso.

"Nuestro servicio hoy apestó. Tardaron 20 minutos en traernos agua, 40 minutos para el aperitivo, y una hora para nuestra entrada.

La gente a nuestro alrededor se burlaba del restaurante y del mal servicio que tenía. Sí, fue bastante terrible.

Pero era muy obvio que el problema era su falta de personal, no el mesero. Él corría por todos lados como loco y jamás se mostró irritado con ninguna mesa. En un punto contamos que eran 12 las mesas que atendía, más el bar.

¡Mucho más de lo que cualquier persona podría manejar!"

La pareja terminó su cena y pidió la cuenta. El mesero regresó, agradeció su visita y corrió una vez más a atender a los demás clientes.

Justo cuando su ocupado mesero se fue, Steven y Makenzie se vieron mutuamente y sonrieron. Conocían ese sentimiento muy bien; así que dejaron algo increíble en el cheque en blanco y se retiraron.

"Mientras le veía llegar a otra mesa y disculparse por la tardanza le dije a Steven: 'Wow, estos solíamos ser nosotros. No extraño ese trabajo para nada y ni siquiera me gustaba, lo hacía por las propinas'.

Steven y yo acordamos que sería bueno hacerle la noche a nuestro mesero ya que probablemente no recibiría muchas propinas debido a la lentitud del servicio.

Salimos antes de que lo viera, y no comparto esto para recibir una palmadita en la espalda.

Lo hago como un amistoso recordatorio de que debemos pensar en la situación en su totalidad antes de juzgar. Y siempre, siempre, siempre recordar de dónde venimos."

En vez de castigar al abrumado mesero debido a la falta de personal del restaurante; ellos decidieron recompensarlo por hacer su mejor esfuerzo en una situación tan caótica. Le dejaron $ 100 dólares de propina por una cena que sólo costo $ 66 dólares junto con la frase: "Ambos hemos estado en tus zapatos. Devolviendo el favor"

Steven y Makenzie fueron ambos meseros en un restaurante de camarones en su juventud y entendieron lo complicado que puede ser una noche atareada. Ojalá que la gente recuerda la experiencia de esta pareja la próxima vez que vayan a un restaurante y esté muy ocupado.

Recodemos que nadie trabaja gratis, cada uno da su mejor esfuerzo por ganar el dinero que llevará a su casa, sepamos apreciarlo. No se trata ya solamente de dejar propina a los meseros, ¿cuántas veces has regateado el precio de alguna artesanía o un oficio? Los artesanos, mecánicos, pintores, jardineros, plomeros y más hacen un trabajo importante por el que merecen respeto y compensación. Tan importante como cualquier otro. Aprendamos a valorarlo.

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Fuente:

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Vía: www.porquenosemeocurrio.com